miércoles, diciembre 31

A L M A S H E R I D A S

Viniste a mi ¡tántas veces!
encendido
meciéndote
cual palmera quiere huir de su calor.
Traías la ofrenda desnuda
de tus deseos y desvelos
¿porqué me elejiste?
si estaba retorcida de dolor
y mi congoja era enorme.
Robaron el placer de mi cuerpo
y mi derecho a sentir.
Era animal herido
que esconde sus llagas vergonzosas
era un grito contenido
una réplica llorosa
una mano escondida fatigada y ausente.
Sentí desprecio que hostigaba
mi femineidad
replegandome cual molusco
esconde su perla entre valvas obstinadas.
¿Porqué yo,
si nada podía ofrecer
cuando la ternura había huído
y el dolor habitaba
en la cuenca de mis ojos?
Si en el umbral de mi garganta
había un pájaro herido
esperando volar y acomodar su trino
en un nidal amoroso
y no en medio de filosos cristales
que destemplaban su grito?
Un día te ví con otros ojos
y algo en mi cambió
y fui tu caracola tímida.
Quise entrar a tu playa
navegar en tu mar
y arrojarme a la red
que tendía tu mirada huidiza
viendo el mismo horizonte
enlazados...desde entonces...
inmersos en esa playa salina
delirantes, apagarnos la sed
de nuestras almas heridas.
Malu de Lujan

No hay comentarios: